El Tratado de Marrakech: la situación rusa.

La Federación Rusa se ha unido al Tratado de Marrakech para facilitar el acceso a las obras impresas a las personas ciegas, deficientes visuales o con otras dificultades para el acceso al texto impreso, ratificándolo en 2018.

Con este fin el gobierno de la Federación Rusa, en colaboración con la Asamblea Federal de la Federación Rusa, ha tomado una serie de medidas para ajustar la legislación rusa al Tratado. Esta actividad se llevó a cabo de manera conjunta con el Ministerio de Cultura de la Federación Rusa y otras organizaciones involucradas, incluyendo la Asociación Rusa de Ciegos (VOS). VOS ha transferido el texto del Tratado a formatos especiales de audio accesibles para las personas con discapacidad visual para que puedan familiarizarse con este documento.

Las partes contratantes del tratado deben establecer un conjunto normativo de restricciones y excepciones de copyright, de forma que las obras impresas puedan reproducirse, distribuirse y ponerse a disposición del público en formatos accesibles para las personas con discapacidad visual, permitiendo a su vez el intercambio transfronterizo de estas obras entre las organizaciones que representan a estos beneficiarios.
Los cambios y adiciones más relevantes afectaron en particular al Código Civil de la Federación Rusa, concretamente al artículo N. 1274: "El libre uso de una obra con fines informativos, científicos, educativos o culturales”.

El párrafo 2 de este artículo se redactó como sigue:
2. Se permite la creación de copias de trabajos publicados de manera legal en formatos destinados exclusivamente al uso por parte de personas ciegas y deficientes visuales (texto de puntos en relieve y otros métodos especiales) (formatos especiales), así como la reproducción y distribución de dichas copias con fines no comerciales, sin el consentimiento del autor o propietario de otros derechos de exclusividad y sin remuneración, pero será obligatorio indicar el nombre del autor, la obra utilizada y la fuente del préstamo.

“Las bibliotecas podrán ofrecer de forma temporal y gratuita copias de las obras creadas en formatos especiales a las personas ciegas y deficientes visuales, que tendrán la posibilidad de solicitar su préstamo, facilitando el acceso a las mismas por medio de redes de información y de telecomunicación. El gobierno de la Federación Rusa establecerá una lista de formatos especiales, así como un listado de las bibliotecas que ofrecen acceso a copias de obras en formatos especiales a través de redes de información y telecomunicación, así como el procedimiento para facilitar dicho acceso.   
No se permite la reproducción o distribución de las copias de las obras destinadas al uso exclusivo por parte de personas ciegas o deficientes visuales”.

Además el gobierno ruso decretó que:  
“Tras la aprobación de un listado de formatos destinados al uso exclusivo por parte de personas ciegas y deficientes visuales (texto de puntos en relieve y otros métodos especiales)” se adoptará “una lista de bibliotecas que ofrecen a las personas ciegas y deficientes visuales acceso a copias de obras creadas en formatos destinados al uso exclusivo por parte de personas con discapacidad visual (texto de puntos en relieve y otros métodos especiales) a través de redes de información y comunicación, así como la normativa bibliotecaria para la gestión del acceso de las personas ciegas y deficientes visuales a copias de obras creadas en formatos destinados exclusivamente para su uso (texto de puntos en relieve y otros métodos especiales) a través de redes de información y telecomunicación”.
   
En el decreto se aprueban los siguientes formatos especiales:

  • Braille, para la escritura y la lectura de las personas ciegas, en formato impreso y digital.
  • Libros “hablados” escritos en formato audio digital criptoprotegido para ser escuchado en un reproductor “tifloflash”.
  • Materiales gráficos adaptados para las personas con discapacidad visual: mapas, diagramas, dibujos, pinturas.

Gracias a las medidas que se han tomado para implementar el Tratado de Marrakech, se ha simplificado y extendido el acceso a la información de las personas ciegas y deficientes visuales, lo que contribuye a la rehabilitación e integración sociocultural de las personas rusas con discapacidad visual en la sociedad contemporánea.